Los hombres de una cultura siempre han sabido que había extranjeros que tenían otras costumbres y otras lenguas. Y el extranjero siempre ha sido inquietante: entonces ¿hay otras maneras de vivir, además de la nuestra? La traducción ha sido siempre una respuesta parcial a esta “experiencia de lo extranjero”.
Paul Ricoeur, Un “pasaje”: traducir lo intraducible.